Día 5 de febrero 2009.
A las 11:30 sale de Madrid un tren con destino Málaga. Voy en él. Por momentos se pone a más de 300 por hora.
Dicen que la velocidad vibratoria del sistema solar se acelera, y yo eso no lo sé, pero desde luego que los trenes aceleran que da gusto o susto, dependiendo de desde dónde se mide la velocidad.
En el vagón número 9 viajamos unas 16 personas y huele a geriátrico. Una voz ajada de Mérida y feminidad de posguerra recita al vagón entero (si bien su interlocutor era un individuo menudo y avergonzado que trataba de hacerle bajar la voz...) todo lo que su memoria semántica es capaz de hilvanar. Un sin-sentido de refranes, dolencias y olores de campo.
Una película en la que el amor que vuelve no es el que se fue, con humor fácil y difícil, un encuentro más entre yo ideal e ideal del yo, como un chiste sobre la realidad israelí. En un periódico del domingo leo una anécdota en la que un político dice (al hilo de las encuestas ante las próximas elecciones en Israel) que los resultados electorales ´solo se saben después de la elecciones'. El embajador de Israel en España dijo que en allí ni siquiera se saben después de las elecciones.
Pero volvamos al viaje.
El vagón cafetería me sigue pareciendo antinatura, como un caza estático, aunque siempre paso medio viaje en él.
Al llegar a Málaga un aguacero me salpica recuerdos. En estos días recientes han habido demasiadas lluvias y vientos huracanados que arrasaron con techos y algunas estructuras no muy resistentes. La prensa local y la calle enseguida muestra lo que fue una especie de tornado. En fin, imparable naturaleza sagrada.
La bota derecha (que me regalaron en un viaje surrealista en Zamora) se abre como la boca de un pez espada desde la punta (por la parte interior) hasta la vertical del tobillo, toda ella hambrienta, y así, agua va agua viene, llego al hotel.
La habitación está en un cuarto piso y Silvia me acompañó a abrirme. Silvia era una empleada del hotel y no una pornostar que viniera conmigo. Silvia hubo de abrir mi puerta (y no sólo la mía) porque el ordenador central se había colapsado, y claro, como ahora las llaves modernas también dependen del ordenador pues no se podían reprogramar. Esto es lo que me dijo un tío sonriente con cara de no tener ni puta idea de porque pasaba eso. Esta misma persona me dijo que me llamaba igual que un artista, y al verme con una guitarra pensó que podría ser yo mismo. Se me desprogramó mi ordenador. Silvia abrió y despareció. A seguir subsanando las idas y venidas del ordenador central y las de su compañero de turno diría yo.
Un canutito. Una hora de asuntos propios.
Bocata mixto, cocacola, café y whisky.
Sigue lloviendo.
Pruebo en Fnac a las 6, y me tratan muy bien por allí (un saludo a Juanlu) así da gusto.
Han venido Javi y Juan de “La Botica” que es dónde tocamos al día siguiente. Tambie´n la hermana de mi escudero ausente.
A las 11:30 sale de Madrid un tren con destino Málaga. Voy en él. Por momentos se pone a más de 300 por hora.
Dicen que la velocidad vibratoria del sistema solar se acelera, y yo eso no lo sé, pero desde luego que los trenes aceleran que da gusto o susto, dependiendo de desde dónde se mide la velocidad.
En el vagón número 9 viajamos unas 16 personas y huele a geriátrico. Una voz ajada de Mérida y feminidad de posguerra recita al vagón entero (si bien su interlocutor era un individuo menudo y avergonzado que trataba de hacerle bajar la voz...) todo lo que su memoria semántica es capaz de hilvanar. Un sin-sentido de refranes, dolencias y olores de campo.
Una película en la que el amor que vuelve no es el que se fue, con humor fácil y difícil, un encuentro más entre yo ideal e ideal del yo, como un chiste sobre la realidad israelí. En un periódico del domingo leo una anécdota en la que un político dice (al hilo de las encuestas ante las próximas elecciones en Israel) que los resultados electorales ´solo se saben después de la elecciones'. El embajador de Israel en España dijo que en allí ni siquiera se saben después de las elecciones.
Pero volvamos al viaje.
El vagón cafetería me sigue pareciendo antinatura, como un caza estático, aunque siempre paso medio viaje en él.
Al llegar a Málaga un aguacero me salpica recuerdos. En estos días recientes han habido demasiadas lluvias y vientos huracanados que arrasaron con techos y algunas estructuras no muy resistentes. La prensa local y la calle enseguida muestra lo que fue una especie de tornado. En fin, imparable naturaleza sagrada.
La bota derecha (que me regalaron en un viaje surrealista en Zamora) se abre como la boca de un pez espada desde la punta (por la parte interior) hasta la vertical del tobillo, toda ella hambrienta, y así, agua va agua viene, llego al hotel.
La habitación está en un cuarto piso y Silvia me acompañó a abrirme. Silvia era una empleada del hotel y no una pornostar que viniera conmigo. Silvia hubo de abrir mi puerta (y no sólo la mía) porque el ordenador central se había colapsado, y claro, como ahora las llaves modernas también dependen del ordenador pues no se podían reprogramar. Esto es lo que me dijo un tío sonriente con cara de no tener ni puta idea de porque pasaba eso. Esta misma persona me dijo que me llamaba igual que un artista, y al verme con una guitarra pensó que podría ser yo mismo. Se me desprogramó mi ordenador. Silvia abrió y despareció. A seguir subsanando las idas y venidas del ordenador central y las de su compañero de turno diría yo.
Un canutito. Una hora de asuntos propios.
Bocata mixto, cocacola, café y whisky.
Sigue lloviendo.
Pruebo en Fnac a las 6, y me tratan muy bien por allí (un saludo a Juanlu) así da gusto.
Han venido Javi y Juan de “La Botica” que es dónde tocamos al día siguiente. Tambie´n la hermana de mi escudero ausente.
Si en Barcelona la noche me hizo una Verónica, aquí la tarde me ofreció una abog-hada madrina que además me regalaba libros de poetas.
Vamos a picar algo y tomar una copa Javi, Juan y Armando, (un tío de conversación confortable).
Me dejan en el hotel, y voy a ver la noche de la sal.
A veces hace falta tanto amor, que uno debe sentirse querer.
Día 6 febrero 2009
Desayuno de café y manteca en mostradores de ducados, que no de e-ducados, que son peores.
Voy a ver a Miguel G. para una entrevista. Resulta que es una persona a la que se le puede mirar a los ojos con limpieza.
Antes y después paseo por el puerto y la playa.
El sol se deja ver entre las nubes. Aves a veces sombrean la orilla.
Como con más ruido del necesario, y espero a que llegue la banda de Madrid. El viaje les está resultando pesado porque llueve y nieva mucho en muchos tramos, y hay retenciones y accidentes en varios puntos, (como se entere mi paisana Maleni......)
Desde la 10 llevan en carretera (y conduce David Rodríguez, el batería). Me recogen casi a las 7.
Llegamos a La Botica, montamos, prueba y a tocar. Volví a disfrutar.
Vamos a picar algo y tomar una copa Javi, Juan y Armando, (un tío de conversación confortable).
Me dejan en el hotel, y voy a ver la noche de la sal.
A veces hace falta tanto amor, que uno debe sentirse querer.
Día 6 febrero 2009
Desayuno de café y manteca en mostradores de ducados, que no de e-ducados, que son peores.
Voy a ver a Miguel G. para una entrevista. Resulta que es una persona a la que se le puede mirar a los ojos con limpieza.
Antes y después paseo por el puerto y la playa.
El sol se deja ver entre las nubes. Aves a veces sombrean la orilla.
Como con más ruido del necesario, y espero a que llegue la banda de Madrid. El viaje les está resultando pesado porque llueve y nieva mucho en muchos tramos, y hay retenciones y accidentes en varios puntos, (como se entere mi paisana Maleni......)
Desde la 10 llevan en carretera (y conduce David Rodríguez, el batería). Me recogen casi a las 7.
Llegamos a La Botica, montamos, prueba y a tocar. Volví a disfrutar.
Era la primera vez que tocábamos David, Juan, Alex y yo, pero sin David de la Plaza en la eléctrica (estaba en busca y captura por un amor moreno.) Fue curioso, no tocaba con banda sin él desde hacía 4 años.
La Botica es imprescindible por Javi, que mantiene la música en directo casi como un principio vital, como un sacramento, dentro de la madre iglesia que predica confesiones en la consulta del psicólogo o en un sex-shop.
Gracias, y a todos los que allí estuvisteis. Incluyendo María, la camarera que además de la receta del olvido tiene la del recuerdo.
Y por supuesto a Jose Antonio Delgado y Alfonso. Magníficos.
Al día siguiente resaca y carretera.
(Continuará.....)
La Botica es imprescindible por Javi, que mantiene la música en directo casi como un principio vital, como un sacramento, dentro de la madre iglesia que predica confesiones en la consulta del psicólogo o en un sex-shop.
Gracias, y a todos los que allí estuvisteis. Incluyendo María, la camarera que además de la receta del olvido tiene la del recuerdo.
Y por supuesto a Jose Antonio Delgado y Alfonso. Magníficos.
Al día siguiente resaca y carretera.
(Continuará.....)
18 comentarios:
Tras leerte pensaba en el placer de leer letras ajenas en forma de diario, y analizaba que no es el hecho de no tener vida propia ni una mega-dosis de tiempo libre lo que mueve dicho placer, sino el canalizar de algún modo las formas y sensaciones del que cuenta sus vivencias y contextos. Me gusta cómo escribes, me gusta saber que tras las grandes letras se esconden grandes maneras de contar vida, también a grandes rasgos.
De golpe recordé La tregua de Benedetti y cómo cuando lo finalizas te falta algo... Un algo que es la vida ajena compartida a través de los ojos encuadernados.
En definitiva; se agradece el abrir parte de la vida y narrarla, si llega de un modo sencillo que no trivial.
(Grandes puntos me han hecho descojonarme sola).
Un abrazo en espiral, y felíz Catalina llena.
Karla
....Muchas gracias por socializar tus andares....
un abrazo grande Carlos.
Que guay, me hubiera gustado tanto ir...
Oye, no te animas a hacer lo mismo que en Malaga o Valencia y quedarte en Sevilla despues de tocar en la fnac...mira que tenemos por aqui a Paco cifuentes, Langa, Joaquin y a Chiqui, y se podria montar algo telita de interesante...
Yo también disfruto de esos andares tuyos que conviertes en palabras.
Un saludillo a ese conductor de lujo, David, yo ya le había visto alguna vez (no me refiero conduciendo sino en la batería) con Iratxo. Y flipé el día que le vi en la Fnac de Madrid acompañando a Chaouen. Guauuuu!!!
Os deseo un feliz viaje ahora que parece que todo se mueve (a 300 km/hora o más).
que grande eres Carlos, solo gracias.... saludos desde PERU
gracias por narrarnos la gira con todo lujo de detalles.
besos
.....informe a mi red social malagueña para que fueran a verte.
Hoy hable con ellos, al parecer te pasaste con el "humo de contrabando". ajajajaja....
Te vi en la Fnac, se me hizo raro verte beber sólo agua...Imagino que en la Botica todo fue más "distendido". Pero esas horas están generalmente restringidas para los que tenemos descendencia.
Saludos
y asi...es q viajamos con usted cantautor!!!
gracias por compartirlo.
muchos exitos!
(me gusto lo de El vagón cafetería me sigue pareciendo antinatura, como un caza estático, aunque siempre paso medio viaje en él. )
Saludos cordiales
Georgina
Estaba leyendo lo que escribió Karla y pensaba que me leía el pensamiento (menos mal que está escrito antes de haber generado mis ideas!!!).
Yo también disfruto sintiendo cercanía y familiaridad en las letras de vidas ajenas (pero ""escogidas""), con las que disfruto al cruzarme!
También me he descojonado en algún punto :).
Me encanta ver que hay alternativa, que en la vida una sombra de ala tiene su importancia en una playa visitada por otras infinitas miradas. Y no todas tienen la suerte de captar esa magia.
Me gusta sentir el aire de esa pelea, entre el ala y la corriente, por mantenerse a flote. Y sin haberla presenciado.
Es un lujo poder compartir.
Gracias Carlos por hacernos partícipes, por ponerte el pijama con nosotros y contarnos. Por considerarnos.
Un abrazo sentido, un beso cálido y una sonrisa llena (como la luna del lunes).
Naiara
Gijón te espera, no tenemos trenes tan rápidos, pero si tenemos sidra y buena conversación, en este caso la propiedad conmutativa altera el producto, ya que las palabras entre zumo de manzana fermentado fluyen mejor.
Salud.
Y mañana...Alicante :D
Allí estaré
Ando impaciente esta noche, por degustar tu intranquila calma, por adentrarme en la ruta que establecen tus acordes,por dejarme susurrar por el desgarro que me habla de historias cercanas, comunes y a su vez indescifrables para un buen número de pobres mortales. Un concierto de Chaouen mancha de rojo mi calendario y en cierto modo mi alma. Resumiendo leñes! que hoy es un gran dia, que no os quiero dar la lata...pero hoy en Valencia nos sirven un sorbito de la tacita de plata!
Errante
Espectacular el concierto en el wah-wah... me lo pasé en grande!!! Gracias por todo Carlos y saludos a Alex Martínez!!
Siento mucho no haberme podido quedar después del concierto, si las circunstancias me lo permiten os volveré a ver en Murcia el día 6.
Un abrazo a todos!
para cuando Granada!? Te queremos aqui :)
Desde Mallorca.
Sólo estoy a la espera de que publiques un libro.
Leerte es descifrar la vida, ojear el horizonte de sucesos de alguien extraño.
Ese hombre raro con el pelo largo que me hace viajar doblemente, con el alma y el avión.
Las veces que he pisado Madrid ha sido para ir a verte, loco. Y todas las calles huelen a ti, sé que tus raíces están en la magia de Andalucía pero es inevitable sentir tus pisadas por todos los recovecos de todas las plazas.
Tienes el aire modernista de los hermanos Machado pero no exactamente. Tú, estás aquí y ahora. Eres real.
Gracias.
No me claven por mi pecado, pero el caso es que pequé: No te conocía más que de oídas (a mis casi 35 años), y Curro (uno de los que te montó el sonido en La Botica)me inyectó en vena, en pleno retorno sanguíneo al corazón, algo que se llama "música" pero que significa muchas cosas. Esa noche de viernes estave allí, colgándome con tus historias, disfrutando con tu banda (son unos leones) y dando gracias eternas a los dioses por tener a tiro de piedra, ese templo de los sentimientos que se llama La Botica. Como penitencia a mi castigo me he impuesto emborracharme con tu aire, que si se respira es nocivo... de arte.
Gracias, Chaouen.
Nos volveremos a ver por Málaga, si los tornados se echan a dormir...
" En estos días recientes han habido demasiadas lluvias y vientos huracanados que arrasaron con techos y algunas estructuras no muy resistentes. La prensa local y la calle enseguida muestra lo que fue una especie de tornado. "
Y es como dice Eduardo Galeano nomás: "Nos mean y los diarios dicen llueve".
No te he pedido prestado el nombre de mi blog; he violado el derecho de autoría, lo sé, pero juro que no he podido encontrar nombre más coherente que "Universo Abierto" y por supuesto, su URL es la vida que más escucho sonar en mis auriculares. Amo lo crudo, lo que sale de la madera y de lo profundo. De echar un vistazo por fuera de la ventana y decir: puedo escribir mi versión de lo que la vida es, y... la vida es Semilla en la tierra.
Agradezco el día en que has entrado por mis oídos y te has metido en mi rutina. Me inspiras a escribir y por Dios, que juro decir Gracias que has llegado (al menos de forma ilegal y por este medio) al otro lado del Océano, a mis bastones, a mis psico-dramas y a eso que no se puede nombrar porque "está más allá del muro del lenguaje", citando a Lacan.
A ver cuando te vienes por Argentina. Somos pocos, pero valemos la pena.
Un abrazo !!
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